Ajoblanco andaluz: la sopa fría que siempre apetece en verano
Que no te engañe el nombre: el ajoblanco no sabe a ajo. Esta sopa fría del sur de España tiene como protagonista a la almendra cruda. Su sabor delicado y su textura sedosa la convierten en uno de los platos más refrescantes del verano. Pariente del gazpacho y el salmorejo, el ajoblanco andaluz es uno de los grandes clásicos de la cocina tradicional. Como ocurre con tantas recetas populares, cada casa tiene su versión: algunos lo espesan con pan, otros lo prefieren más ligero o infusionan la almendra para realzar su sabor. Sea como sea, el ajoblanco sigue siendo una sopa fría ideal para los días de más calor, fácil de preparar y perfecta para servir como entrante ligero o cena sencilla.
Ingredientes
4
Costo estimado: 3.34Euros€ (0.84€/porción)
Materiales
- Batidora o robot de cocina
- cazo pequeño
- colador de malla fina
- Bol
- Papel film o recipiente hermético
Preparación
Preparación15 min
Tiempo de espera4 horas
Pesar y preparar los ingredientes que vamos a utilizar en la receta.
Pelar el diente de ajo, retirar el germen si lo tiene y escaldar el ajo en agua hirviendo durante 20 segundos. Escurrir y reservar.
Colocar en el vaso de la batidora la almendra, el ajo escaldado y aproximadamente la mitad del agua (o la cantidad justa para cubrir los ingredientes). Triturar durante unos minutos hasta obtener una pasta.
Añadir el resto del agua, la sal, el vinagre y el pan troceado. Esperar 5 minutos para que el pan se hidrate y triturar hasta obtener una mezcla homogénea.
Con la batidora en marcha, añadir el aceite poco a poco en forma de hilo fino para que el conjunto emulsione correctamente. Probar de sal y vinagre, y corregir si es necesario. La mezcla debe resultar equilibrada, suave y con un punto ácido moderado.
Pasar la mezcla por un colador de malla fina, presionando con una lengua o espátula para obtener una textura sedosa.
Verter el ajoblanco en un recipiente hermético o tapar a piel con papel film y guardar en la nevera durante al menos 4 horas (idealmente 8–12) para que los sabores se integren y para estabilizar la emulsión.
Emplatar el ajoblanco bien frío y decorar con albahaca, aceite de oliva y almendras laminadas ligeramente tostadas.
FAQ ❓
¿Por qué el ajoblanco no sabe a ajo a pesar de su nombre?
Aunque el nombre incluye 'ajo', el ajoblanco utiliza una cantidad muy pequeña de ajo, que además se escalda para suavizar su sabor, resultando en una sopa fría con un sabor delicado y ligeramente dulce, donde la almendra es la protagonista.
¿Cuál es la importancia de dejar reposar el ajoblanco en la nevera durante varias horas?
El reposo en frío, idealmente entre 8 y 12 horas, permite que los sabores se integren mejor y que la emulsión se estabilice, logrando una textura sedosa y un sabor equilibrado.
¿Qué papel juega el pan en la receta y se puede omitir?
Lo ideal es usar la miga de un pan blanco asentado o del día anterior. El pan aporta cuerpo y contribuye a la textura cremosa que caracteriza al ajoblanco. Algunas versiones prescinden de él para obtener una sopa más ligera, aunque en ese caso la consistencia final puede variar.
¿Por qué se recomienda usar almendras Marcona para esta receta?
Las almendras Marcona son preferidas por su sabor suave, dulce y textura cremosa, lo que realza el sabor delicado y la textura sedosa del ajoblanco andaluz.
¿Cómo se logra la emulsión perfecta al añadir el aceite de oliva virgen extra?
El aceite debe incorporarse poco a poco en forma de hilo fino mientras se bate la mezcla, lo que permite que se emulsione correctamente, consiguiendo una mezcla fina, bien ligada y sin grumos.
¿Con qué acompañar el ajoblanco?
Los acompañamientos clásicos son las uvas blancas peladas o el melón, que aportan un contraste dulce y refrescante. También combinan muy bien las almendras tostadas, los higos, la manzana verde, unas sardinas marinadas o incluso brotes tiernos. El toque crujiente, dulce o salino añade complejidad sin restar frescura al plato, y siempre puedes adaptarlo con lo que tengas a mano o te inspire en el momento.
¿Cómo se puede ajustar la textura del ajoblanco?
La textura del ajoblanco se ajusta variando la cantidad de pan o de agua. Si lo quieres más ligero, reduce el pan o añade un poco más de agua. Para una crema más espesa y con más cuerpo, basta con aumentar ligeramente la proporción de pan.
Nutrición
para 1 porción / para 100 g
Calorías: 295Kcal
- Carbohidratos: 3.7g
- Grasa total: 24.6g
- Grasa sat.: 2.1g
- Proteínas: 10.1g
- Fibras: 4.9g
- Azúcar: 0.5g
- ProPoints: 8
- SmartPoints: 9
Información nutricional para 1 porción (145g)
Vegano
Vegetariano
Sin lactosa
Sin huevo
Equipo de cocina
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A saber
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Fotos de miembros
Patricia GonzálezApasionada por la cocina y el buen comer, mi vida se mueve entre palabras bien escogidas y cucharas de madera. Responsable pero despistada. Periodista y redactora con años de experiencia, encontré mi rincón ideal en Francia, donde trabajo como redactora para Petitchef. Me encantan el Bœuf bourguignon pero echo de menos el salmorejo de mi madre. Aquí combino mi amor por la escritura y los sabores suculentos para servir recetas e historias sobre cocina que espero te inspiren. La tortilla, me gusta con cebolla y poco hecha : )
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