Rkhama, el dulce marroquí de cacahuete y chocolate que no necesita horno
Un dulce marroquí con pinta de turrón, textura compacta que se deshace al morder y sabor a cacahuete con chocolate? Existe, se llama rkhama, y lo mejor es que no necesitas horno, ni termómetro, ni media vida en la cocina para prepararlo. Solo un bol, una picadora y un rato de nevera. Este dulce marroquí tradicional se prepara sobre todo durante celebraciones como el Aid el-Fitr (al final del Ramadán) o la fiesta del Cordero, y suele compartirse junto a otras delicias como los briouats de almendras, los baghrirs o un buen vaso de auténtico té marroquí con hierbabuena. La receta es tan fácil como mezclar cacahuetes triturados con leche condensada, perfumar con agua de azahar y cubrir con chocolate fundido. Lo típico es servirlo en rombos decorados con vetas, como si fuera mármol comestible, pero cualquier excusa es buena para prepararlo. Y repetir. Si te gusta el dulce y te apetece probar algo diferente sin complicarte la vida, esta receta marroquí es para ti.
Ingredientes
Materiales
- Picadora o mortero
- Manga pastelera o cono de papel encerado o bolsa de congelación con una esquinita cortada
- Molde (opcional)
- Vaso o cuchara sopera o rasqueta de repostería
- Papel film o papel de horno
- Brocheta de madera o palillo mondadientes o cuchillo






