Pesto de rúcula casero y cremoso en 5 minutos
La primera vez que probé el pesto de rúcula fue por error. Estaba convencida de que era el clásico pesto verde genovés, pero al primer bocado me sorprendió ese sabor ligeramente amargo y fresco, distinto y muy agradable. Desde entonces, se ha convertido en uno de mis condimentos favoritos. El pesto de rúcula es una alternativa rápida, ligera y llena de sabor. Perfecta para quienes buscan algo distinto sin complicarse en la cocina. Se prepara en apenas unos minutos, sin necesidad de cocción, y está listo para usar al momento. Es ideal para acompañar pasta, untar en una tosta o dar un toque especial a ensaladas y platos fríos. Más abajo te explicamos cómo prepararlo paso a paso, con algunos trucos para equilibrar el sabor y conseguir una textura bien cremosa.
Ingredientes
Materiales
- Licuadora
Preparación
Lava bien la rúcula, sécala a fondo y ponla en el vaso de la batidora. Añade el diente de ajo sin germen, el parmesano rallado y los piñones. Tritura a velocidad baja.
Añade una pizca de sal. Incorpora el aceite poco a poco mientras sigues batiendo hasta obtener una mezcla bien emulsionada, lisa y homogénea.
Y ya tienes tu pesto de rúcula listo para acompañar lo que quieras.
Consejos y trucos
¿Cómo se conserva el pesto de rúcula?
Guarda el pesto de rúcula en la nevera, dentro de un tarro pequeño y hermético, y consúmelo en un plazo de 4 a 5 días. Para evitar que se oxide y oscurezca, añade un chorrito de aceite de oliva por encima. También puedes congelarlo en porciones pequeñas (por ejemplo, en una cubitera) y conservarlo varios meses.
¿Se pueden sustituir los piñones en el pesto de rúcula?
Sí, puedes sustituir los piñones por anacardos, almendras o incluso avellanas si quieres variar el sabor o abaratar la receta.
¿Hay que cocer la rúcula para hacer el pesto?
No, la rúcula se utiliza en crudo, igual que en el pesto de albahaca. Eso es precisamente lo que conserva su sabor ligeramente picante y su frescura.
¿Con qué se puede servir el pesto de rúcula?
Queda delicioso con pasta, ñoquis, crostini, bocadillos o para dar un toque diferente a una ensalada de tomate. También combina muy bien con carnes a la parrilla o pescados blancos.
¿Se puede hacer un pesto de rúcula sin parmesano?
Sí, puedes prepararlo sin parmesano, o sustituirlo por una alternativa vegetal (como levadura nutricional) si quieres una versión vegana.
¿Cómo suavizar el sabor amargo del pesto de rúcula?
Si la rúcula te resulta demasiado amarga, puedes añadir unas hojas de espinaca o un poco más de parmesano para suavizar el sabor. También puedes incorporar un chorrito de zumo de limón para equilibrar los matices.
¿El pesto de rúcula es nutritivo?
Sí, la rúcula es rica en vitaminas A y K, además de antioxidantes. Combinada con aceite de oliva y frutos secos, da como resultado un condimento sabroso y saludable.
¿Quieres que tu pesto de rúcula mantenga un color verde brillante durante más tiempo?
Escalda las hojas durante 5 segundos en agua hirviendo con sal y enfríalas enseguida en agua con hielo. Así fijas la clorofila y evitas que el pesto se oxide. No afecta al sabor y el resultado es más vistoso, sobre todo si no lo vas a consumir al momento.
Nutrición
- Carbohidratos: 2.2g
- Grasa total: 33.7g
- Grasa sat.: 5.8g
- Proteínas: 7.4g
- Fibras: 1.9g
- Azúcar: 1.1g
- ProPoints: 10
- SmartPoints: 11
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