El invierno huele a naranjas y mandarinas; por eso, hemos aprovechado para hacer este rico postre que puedes compartir con familiares y amigos. ¡Una verdadera delicia!
Precalentamos el horno a 180ºC. Ponemos en un bol los huevos y el azúcar y con ayuda de unas varillas batimos bien hasta que haya doblado el volumen y nos quede una mezcla blanquecina.
Incorporamos la mantequilla o margarina, derretida y templada, y seguimos batiendo. Rallamos las mandarinas y reservamos la ralladura.
Pelamos las mandarinas y las trituramos hasta obtener una crema fina. Si notamos que hay pellejos es mejor que la pasemos por el chino. Mezclamos esta crema de mandarinas con la cuajada y esta a su vez con la mezcla anterior.
Tamizamos la harina y la levadura y la vamos incorporando, poco a poco, a la crema con movimientos envolventes. Incorporamos la ralladura de mandarina y mezclamos bien.
Si el molde no es de silicóna, lo pincelamos con un poquito de aceite o mantequilla y espolvoreamos con harina, desechando la que nos sobre. Vertemos la mitad de la mezcla del bizcocho en el molde, añadimos las pepitas de chocolate bien esparcidas por toda la superficie y vertemos la otra mitad.
Horneamos a 180ºC unos 35 minutos, horno abajo durante 30 minutos y los últimos 5 minutos poner el horno en la posición arriba y abajo.
Sacamos del horno, dejamos reposar y desmoldamos sobre una rejilla hasta que enfríe.
En la lista de ingredientes, la autora de la receta da la posibilidad de cambiar la cuajada por un yougur. Un saludo y buen provecho! :) Cualquier otra consulta no dude en escribirnos. Un saludo!