Mucha gente cree que las recetas vegetarianas son insulsas, pero os aseguro que a esta no le falta nada de sabor y he conseguido que le guste a personas que con sólo oír la palabra verduras ya tienen el no en la boca. Además de sabrosa, es una receta en la línea de recetas sencillas y con ingredientes habituales, objetivo del blog.
Espero que la disfrutéis tanto como nosotros.
Poner en una cacerola agua a hervir con sal. Cuando rompa a hervir añadir la pasta y cocer el tiempo que marque el fabricante.
Trocear toda la verdura y poner una sartén con un poco de aceite. Incorporar los pimientos, luego la cebolla, los champiñones y por último el calabacín. Rehogar todo y dejar pochar. Cuando casi estén hechas las verduras, añadir los tomates y dejar unos 4 ó 5 minutos.
Añadir la nata líquida para cocinar, salpimentar y dejar que la nata tome el color de los tomates y espese un poco (apróxidamente unos 5 minutos).
Colar la pasta y mezclar con la salsa. Servir de inmediato.
Buen provecho.
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