Ñoquis de calabaza caseros, suaves, delicados y perfectos para el otoño
Cuando bajan las temperaturas y los mercados se llenan de calabazas anaranjadas, apetece volver a los platos que reconfortan. Estos ñoquis caseros de calabaza son justo eso: una receta sencilla y deliciosa, perfecta para disfrutar en casa, sin prisas, en un almuerzo de otoño. Elaborados con calabaza asada, patatas y un toque de parmesano, se moldean a mano y sorprenden por su textura suave, más tierna que la de los ñoquis tradicionales. Su sabor, con ese equilibrio tan agradable entre lo dulce y lo salado, los convierte en un bocado irresistible. Deliciosos con mantequilla y salvia, un poco de nata o una fina capa de queso rallado.
Ingredientes
2
Costo estimado: 2.05Euros€ (1.02€/porción)
Materiales
- Bol
- Cuchillo
- Cazo o olla
- Bandeja de horno
- Papel de horno
- Batidora de mano (o batidora de brazo)
Preparación
Preparación40 min
Cocción2 min
Cortar la calabaza en rodajas, pelarla y colocarla en una bandeja forrada con papel de horno. Hornear en modo estático a 180 °C durante unos 30 minutos, hasta que esté blanda y bien seca.
Triturar la calabaza cocida con una batidora hasta obtener un puré fino y dejar templar.
Cocer las patatas con piel en abundante agua con sal durante 30-35 minutos. Pelarlas aún calientes y pasarlas por un prensapatatas. Dejar que el puré se enfríe ligeramente.
En un cuenco grande, mezclar la calabaza con las patatas, añadir el huevo, el queso parmesano y una pizca de sal. Remover hasta obtener una mezcla homogénea.
Incorporar poco a poco la harina y trabajar la masa con rapidez, solo lo necesario para conseguir una textura suave pero que no se pegue a las manos.
Pasar la masa a la superficie de trabajo enharinada y formar un bloque compacto.
Dividirlo en cuatro partes iguales y estirar cada una hasta obtener cilindros de unos 2 cm de grosor. Cortar en trozos y, si se desea, darles la forma clásica pasándolos por los dientes de un tenedor o por una tablilla estriada para ñoquis.
Colocar los ñoquis sobre una bandeja enharinada, evitando superponerlos. Ya están listos para cocer en abundante agua con sal y servir con la salsa preferida.
FAQ ❓
¿Cómo evitar que los ñoquis de calabaza queden demasiado blandos?
El secreto está en eliminar bien el exceso de agua de la calabaza después de cocinarla. Puedes escurrirla con cuidado o darle unos minutos de horno para que se seque ligeramente. La harina debe añadirse poco a poco, solo la justa para lograr una masa blanda que no se pegue a los dedos. Demasiada harina los volvería duros; poca, haría que se deshicieran al cocer.
El equilibrio perfecto garantiza unos ñoquis tiernos y que se funden en la boca.
El equilibrio perfecto garantiza unos ñoquis tiernos y que se funden en la boca.
¿Con qué acompañar los ñoquis de calabaza?
Van de maravilla con una salsa de mantequilla y salvia, una crema ligera de parmesano o una salsa de queso azul para una versión más intensa. También puedes servirlos con verduras asadas de otoño o con una ensalada de rúcula, que aporta frescor al plato.
Si te gusta el contraste dulce-salado, añade unas avellanas tostadas o unas láminas de parmesano antes de servir.
Si te gusta el contraste dulce-salado, añade unas avellanas tostadas o unas láminas de parmesano antes de servir.
¿Se pueden preparar los ñoquis de calabaza con antelación?
Sí. Puedes formarlos y guardarlos en la nevera durante 24 horas sobre una bandeja ligeramente enharinada. También se pueden congelar en crudo: colócalos separados sobre una bandeja, congélalos y luego guárdalos en una bolsa hermética. Para cocerlos, no los descongeles: échalos directamente en el agua hirviendo y añade uno o dos minutos al tiempo de cocción.
¿Qué tipo de calabaza es mejor para hacer ñoquis?
Las mejores son el potimarron (calabaza de Hokkaido) y la calabaza butternut. Su pulpa es densa, ligeramente dulce y mantiene bien la forma al cocinarse. Aportan un color naranja intenso y un sabor suave. Evita las variedades muy acuosas, que dejarían la masa pegajosa. El potimarron tiene además la ventaja de poder utilizarse con la piel bien lavada.
¿Cómo conseguir unos ñoquis ligeros y esponjosos?
Para lograr una textura suave y aireada, hay que trabajar la masa lo mínimo posible, solo hasta que los ingredientes se integren.
La mezcla de patata y parmesano rallado aporta cuerpo y sabor, sin necesidad de más harina. Una cocción breve y un ligero salteado final en la sartén son la clave para que queden fundentes por dentro y delicadamente dorados por fuera.
La mezcla de patata y parmesano rallado aporta cuerpo y sabor, sin necesidad de más harina. Una cocción breve y un ligero salteado final en la sartén son la clave para que queden fundentes por dentro y delicadamente dorados por fuera.
Nutrición
para 1 porción / para 100 g
Calorías: 490Kcal
- Carbohidratos: 80.7g
- Grasa total: 7.2g
- Grasa sat.: 3.3g
- Proteínas: 20.9g
- Fibras: 7g
- Azúcar: 4g
- ProPoints: 13
- SmartPoints: 14
Información nutricional para 1 porción (354g)
Vegetariano
Equipo de cocina
licuadora
A saber
Se puede congelar
Conservar en frigorífico
Preguntas
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