Ante todo, se pueden cambiar las proorciones de los ingredientes.
Si nos sucede esto, añadiremos más harina blanca o integral hasta conseguir una bola que se despegue de las paredes y no deje restos.
Usamos el programa pan integral de nuestra panificadora. El resultado es un pan no demasiado alto, denso y húmedo, con mucho carácter y que se conserva perfectamente por lo menos tres días.