Helado casero sin heladera: el capricho más fácil (y viral) del verano

domingo 24 agosto 2025 09:00 - Daniele Mainieri
Helado casero sin heladera: el capricho más fácil (y viral) del verano

Que en verano hace calor no sorprende a nadie. Que con ese calor lo único que apetece es un helado cremoso y bien frío, tampoco. Pero si además puedes prepararlo en casa, sin heladora y sin complicarte la vida, entonces sí hablamos de una pequeña gran victoria veraniega.

El helado casero sin máquina es una de las recetas virales del verano 2025: sencillo, rápido y, lo mejor de todo, delicioso. La propuesta de hoy se hace con mango, la fruta tropical por excelencia, y está lista en apenas unos minutos, con ingredientes naturales y cero estrés. Ideal para quienes buscan un postre saludable, sin conservantes, pero con toda la cremosidad de una buena heladería artesanal. ¡Vamos a ver cómo se prepara!


¿Qué necesitas para preparar helado de mango sin heladera?

  • 250 gr de mango
  • Jugo de 1 lima
  • 10 gr de maicena
  • 15 ml de agua
  • 20 cl de nata líquida (30% mg)
  • 120 g de azúcar

Para decorar:

  • Coco o cáscara de lima (opcional)

1. Preparar la base cremosa

1. Preparar la base cremosa

Diluimos la maicena en el agua fría y vertemos la mezcla en un cazo. Añadimos el azúcar y la nata, y mezclamos con unas varillas. Llevamos a fuego medio y, sin dejar de remover, calentamos hasta que rompa a hervir. En ese momento, bajamos un poco el fuego y dejamos espesar durante 3 minutos, siempre removiendo. Retiramos del fuego y dejamos enfriar por completo.

2. Triturar el mango

2. Triturar el mango

Exprimimos el zumo de lima y cortamos el mango en dados. Trituramos ambos ingredientes hasta obtener un puré fino y homogéneo.

3. Mezclar y congelar

3. Mezclar y congelar

Combinamos el puré de mango con la base ya fría. Vertemos la mezcla en un recipiente apto para congelación, cubrimos con film transparente en contacto directo y llevamos al congelador durante un mínimo de 3 horas.

4. Batir y dar textura

4. Batir y dar textura

Pasado ese tiempo, batimos el helado con una batidora de mano o de vaso para recuperar una textura cremosa. Tapamos de nuevo y dejamos reposar en el congelador durante toda la noche. A la hora de servir, podemos decorar con un poco de coco rallado o ralladura de lima.

¿Y si no tengo mango?

No pasa nada. Si quieres hacer este helado pero no tienes mango o simplemente no te apetece, hay otras frutas que pueden reemplazarlo sin problema. Lo importante es que tengan una pulpa densa, que no suelten demasiada agua y que, al triturarlas, quede todo bien cremoso sin necesidad de meterle un extra de lácteos.

La opción más fácil y resultona es el plátano maduro: dulce, mantecoso y con una textura que parece hecha para esto. También funcionan bien los melocotones y albaricoques bien maduros, siempre que estén jugosos y no demasiado ácidos. Si están demasiado verdes no nos aportarán la textura jugosa y cremosa que vamos buscando.

El sabor del verano, versión casera

Así que ya lo sabes: si te apetece un buen helado casero, aunque no tengas heladera, esta receta es una opción perfecta. Sin aditivos raros, fácil de hacer y tan rica que puedes servirla cuando tienes invitados... o disfrutarla tú solo en el sofá, que también tiene su encanto. Si te animas a probarla, cuéntanos en los comentarios qué te ha parecido.

Daniele MainieriDaniele Mainieri
Cada día me sumerjo en el mundo de la cocina, buscando nuevas recetas y sabores para compartir: desde el plato de la abuela hasta las últimas tendencias alimentarias. ¡Llevo más de 10 años trabajando en comunicación alimentaria!

Comentarios

Califica este artículo:
4/5, 5 votos