Fish & Chips: las sorprendentes raíces sefardíes de un icono británico
Quien haya viajado al Reino Unido habrá probado, aunque solo sea una vez, el célebre Fish & Chips. Servido en cucuruchos de papel, con el olor de la fritura impregnando las calles y esa mezcla de pescado dorado y patatas suaves, se trata de una experiencia que asociamos de inmediato a la identidad británica. Pero lo que pocos saben es que este “plato nacional” esconde un origen mucho más complejo, antiguo y, para sorpresa de muchos, mediterráneo. Sus raíces se hunden en la diáspora sefardí, en la España de la Inquisición y en la llegada de la patata desde el Nuevo Mundo.
Lo que hoy conocemos como Fish & Chips es, en realidad, el resultado de un viaje histórico que entrelaza persecuciones religiosas, comercio transoceánico y transformaciones sociales de la Inglaterra industrial. Un plato que no es solo comida: es también un relato vivo de mestizaje cultural.
El pescado frito de los sefardíes
Para entender la historia, hay que retroceder hasta 1492, cuando los Reyes Católicos expulsaron a los judíos de España con el Edicto de Granada. Aquel éxodo llevó a miles de sefardíes a distintos rincones del Mediterráneo y, más tarde, del norte de Europa. Entre sus costumbres viajó una receta con larga vida: el pescado blanco rebozado y frito en aceite abundante, que se preparaba en viernes para poder comerlo frío durante el sábado, día de Shabat en el que estaba prohibido cocinar.
Cuando algunos sefardíes llegaron a Londres entre los siglos XVII y XVIII, sobre todo al barrio de Spitalfields, llevaron consigo esta tradición. Los ingleses, intrigados por aquel pescado dorado, terminaron por adoptarlo y adaptarlo a su propia despensa.
La llegada de la patata y la pareja perfecta
Las patatas, hoy tan comunes, fueron un añadido tardío a la cocina británica. Originarias de los Andes, llegaron a Europa de la mano de los conquistadores españoles y se extendieron lentamente hasta convertirse, en el siglo XIX, en un alimento barato y popular en Inglaterra.
Fue en plena Revolución Industrial cuando el pescado frito se casó con las patatas, dando lugar al binomio que conocemos hoy. Nacieron las primeras freidurías, locales humildes que ofrecían un menú nutritivo, sabroso y asequible: pescado frito con patatas. Dos ingredientes con trayectorias lejanas que, al encontrarse, crearon una combinación destinada al éxito.
El boom en la Inglaterra industrial
En el siglo XIX, el país vivía un crecimiento urbano sin precedentes. La clase trabajadora, atrapada en horarios interminables, necesitaba comida rápida, caliente y barata. El Fish & Chips se convirtió en la respuesta perfecta y, de paso, en uno de los primeros ejemplos de comida rápida moderna.
¿Por qué triunfó?
- Era barato: merluza (u otros pescados blancos) abundaba y costaba poco.
- Era rápido: la fritura no lleva más que unos minutos.
- Era completo: proteínas, carbohidratos y grasa en un solo plato.
- Era práctico: envuelto en papel de periódico, podía comerse en la calle.
Mucho más que un símbolo británico
Hoy el Fish & Chips es uno de los emblemas más reconocibles del Reino Unido. Saber que sus raíces están en la cocina sefardí no le resta fuerza: al contrario, enriquece su relato y lo convierte en símbolo de lo que surge cuando culturas, tradiciones y necesidades se entrecruzan. En un mundo marcado por migraciones e identidades múltiples, este plato recuerda que la mesa siempre ha sido un espacio de mestizaje.
La próxima vez que tengas delante un Fish & Chips recién hecho, recuerda: no es solo una especialidad inglesa, sino también un pedazo de historia compartida.
Fuentes:
Claudia Roden, The Book of Jewish Food, Penguin Books, 1999.
Panikos Panayi, Fish and Chips: A History, Reaktion Books, 2014
BBC History Extra - "La sorprendente historia del pescado y las patatas fritas".
The Guardian - "Fish and chips: una historia de migración, identidad y reinvención".
Museo Judío de Londres - "Sefardi Jewish Food Culture in Britain".
Oxford Companion to Food - Alan Davidson
Khadija Diagne
Comentarios