En septiembre, higos al horno con queso de cabra y miel
No hace falta que nadie me lo pregunte ni que exista un ranking oficial, pero para mí septiembre tiene un protagonista indiscutible en mi cocina: los higos, sobre todo cuando se preparan al horno con queso de cabra y miel. Durante el verano he disfrutado de ensaladas frescas, helados improvisados y melocotones jugosos, pero cuando llegan los higos, todo lo demás queda en segundo plano.
De pequeña los comíamos directamente del frutero, sin más ceremonia que partirlos en dos y saborearlos despacio. Esa simplicidad sigue siendo perfecta, pero cuando quiero darles un aire más especial o sorprender a la familia, me gusta encender el horno y jugar con un par de añadidos que los transforman: queso de cabra, miel y un poco de hierbas aromáticas.
La gracia está en lo sencillo. Unos cortes, unos minutos de calor y la fruta se convierte en un bocado tibio y meloso, con el queso fundido y la miel envolviéndolo todo. Es una de esas recetas que no necesita adornos: pocos ingredientes, mínimo esfuerzo y un resultado que transforma lo cotidiano en algo memorable.
Lo que necesitas para esta receta de higos
- 4 higos
- queso de cabra
- miel
- romero
- sésamo o ajonjolí (opcional)
Cómo preparar la receta, paso a paso
- Enciende el horno y llévalo a 200 °C.
- Abre los higos haciendo un corte en cruz en la parte superior.
- Rellénalos con media rodaja de queso de cabra, añade un hilo de miel y un poco de romero fresco.
- Espolvorea sésamo sobre la superficie.
- Hornea durante 5 minutos a 200 °C y sírvelos al momento. ¡Listo!
Consejos prácticos para sacarles el máximo partido
- El maridaje ideal: Estos higos se llevan bien con vinos blancos aromáticos y espumosos ligeros; si los sirves como postre, un moscatel o un Pedro Ximénez realzarán aún más su carácter.
- Sirve los higos recién horneados: El contraste entre la fruta tibia, el queso fundido y el toque dulce de la miel es lo que hace de esta receta un bocado especial. Lo ideal es sacarlos del horno justo antes de llevarlos a la mesa.
- ¿Entrante o postre? Tienen la versatilidad de adaptarse a ambas opciones: como tapa elegante al inicio o como un cierre dulce y original de la comida.
- También en freidora de aire. Si no quieres encender el horno, 5 minutos a 180 ºC bastan para obtener el mismo efecto: queso fundido, miel brillante y un bocado perfecto.
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Una receta que no falla
Es una combinación ganadora: la dulzura melosa de los higos, la intensidad cremosa del queso de cabra y el brillo cálido de la miel. Al reunirse en el horno, estos tres ingredientes se transforman en algo más que la suma de sus partes: un bocado tibio y fragante, que juega con el contraste entre lo suave y lo intenso y lo dulce. ¿Y tú, cómo sueles cocinarlos? ¿te ha gustado esta idea?
Patricia González
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