Las ensaladas son las reinas del verano. Refrescantes, ligeras, coloridas y saciantes. Una buena opción para combatir el calor sin tener pasar horas y horas en la cocina. Una forma muy saludable de disfrutar comiendo. Y si la elección de ingredientes es importante para hacer una buena ensalada no lo es menos el aderezo con la que la acompañamos.
Muchos de las salsas que podemos comprar en el supermercado están llenos de conservantes, ingredientes procesados y un exceso de grasas, azúcares y sal para aumentar su sabor. Razón suficiente para que te animes a preparar tus propios aliños. Mucho más saludable y considerablemente más barato. Ya verás que una vez que más o menos controles las proporciones podrás realizar fácilmente variaciones. Para iniciarte puedes comenzar por conocer los secretos y proporciones para hacer una vinagreta perfecta.
A continuación,te mostramos varias de nuestras salsas caseras preferidas para aliñar nuestra ensaladas. Desde una vinagreta clásica, a una salsa de yogur, pasando por la popular tzaltiki o una sabrosa salsa cocktail pasando por muchas otras. ¿Cuál será tu preferida?
Salsa César
Esta famosa ensalada con nombre propio se asocia mucho a Estados Unidos aunque es originaria de Ciudad de México donde la creó el chef César Cadini que incluso llegó a patentar su sabrosa salsa. Debido a las variaciones que ha sufrido la receta original a lo largo de los años se ha creado un debate sin una única solución ¿hay que agregar (o no) anchoas a esta salsa?
Tzatziki, la salsa griega de yogur
La más refrescante de todas. Esta salsa, de origen griego, en la que se combina el yogur y el pepino es una auténtica delicia. Tanto nos vale para dipear y mojar unos bastones de verduras como para alegrar nuestra ensalada. Ideal para los días de calor! Por cierto, si tienes un poquito de eneldo no dudes en echarle un poquito ;-)
Salsa de yogur
Te mostramos la receta básica, pero no dudes en añadir las especias que más te gusten! Con curry por ejemplo queda de 10! Para hacer esta salsa puedes usar, por ejemplo, yogur griego porque queda con una textura muy cremosa y con bastante sabor; pero para hacer una versión más saludable no dudes en usar un yogur natural o un skir. ¡Una receta tan fácil, rápida, deliciosa y ligera que asombra!
Mayonesa
Aunque asociemos esta salsa a la comida rápida tipo hamburguesas, patatas fritas, también es imprescindible elaborar algunas de las ensaladas más famosas. La ensaladilla rusa, la ensalada Biof, tradicional de rumanía, la Coleslaw o la Kartoffelsalat la famosa ensalada alemana de patata y salchichas. Para hacer esta receta tendremos que emulsionar huevos crudos y aceite. Por eso, y para evitar problemas con la salmonella te recomendamos usar huevos pasteurizados a recurrir a nuestra Lactonesa, una mayonesa que hacemos sin usar huevo.
Salsa de miel y mostaza
Y ahora que sabemos hacer una mayonesa casera podemos usar como base para elaborar otras salsas, tanto o más ricas. Por ejemplo esta salsa de miel y mostaza que queda riquísima y además es muy versátil. Nos puede servir para acompañar carnes, pescados y por supuesto ensaladas.
Salsa Rosa
Ahora, te mostramos otra receta en la que usaremos como base la mayonesa, la indispensable salsa rosa o salsa cocktail. Para hacer una verdadera salsa rosa no bastará con echarle ketchup, hay que aderezarla con otros ingredientes que le aportarán muchos matices: salsa inglesa, zumo de naranja, brandy… No dudes en usar esta salsa para aderezar cóctel de gambas, huevos rellenos, sándwiches y todo tipo de ensaladas.
